Frasco Torácico Descartable

FRASCO TORÁCICO DESECHABLE

Un frasco torácico desechable, también conocido como drenaje torácico o sistema de drenaje pleural, es un dispositivo médico utilizado en medicina para tratar problemas en la cavidad torácica, como neumotórax, derrame pleural o hemotórax. Estos dispositivos son una parte esencial del tratamiento y el manejo de estas afecciones.
Propósito: El frasco torácico se utiliza para eliminar el aire o el líquido acumulado en la cavidad torácica (el espacio entre la pared del pecho y el pulmón). Esta acumulación puede comprimir el pulmón y dificultar la respiración. El frasco torácico permite la evacuación de este aire o líquido y ayuda a restablecer la presión normal en la cavidad torácica.
Componentes: Un frasco torácico desechable consta de varios componentes, que incluyen un tubo de drenaje, un frasco de recolección y una válvula unidireccional. El tubo se inserta en el espacio pleural a través de una pequeña incisión en la pared del pecho, y el extremo del tubo se conecta al frasco de recolección, que contiene un líquido sellante. La válvula unidireccional permite que el aire o el líquido salgan de la cavidad torácica pero evita que vuelvan a entrar.
Procedimiento: La colocación del frasco torácico generalmente se realiza en un entorno quirúrgico o en una unidad de cuidados intensivos. Se realiza bajo anestesia local o general. El tubo se inserta en la cavidad torácica y se conecta al frasco de recolección. A medida que el aire o el líquido son expulsados de la cavidad torácica, se acumulan en el frasco.
Monitoreo: Una vez que se coloca el frasco torácico, se monitorea continuamente para asegurarse de que esté funcionando correctamente. Se observa el nivel del líquido en el frasco para evaluar la cantidad de drenaje y se realiza radiografía de tórax para verificar la posición del tubo y el estado del pulmón.
Eliminación y cierre: Cuando se ha drenado suficiente aire o líquido de la cavidad torácica y se ha restablecido la función pulmonar normal, se puede retirar el frasco torácico. La incisión en la piel se cierra y se vigila al paciente para detectar cualquier complicación potencial.